Dice el poeta Percy Bysshe que “cuando las voces suaves mueren, su música vibra aún en la memoria». Y es que las voces de los santos siguen estando de actualidad a pesar de que los intereses de mercado se empeñen en sustituirlos por monstruos, seres fantásticos y calaveras. En nuestro Centro hace ya algunos años que los alumnos realizan una actividad en la que los hacemos presentes y más vivos que nunca.
Desde la asignatura de religión, los alumnos de 4t ESO dedican un par de sesiones a estudiar la vida de un santo. A cada grupo se le asigna un santo. Se acercan a su vida, recogen información, destacan los valores que emanan de sus vidas y preparan un teatro y una actividad para darlo a conocer a los alumnos de primaria.
La víspera de Tot Sants, los alumnos acuden a las clases de primaria disfrazados y dispuestos a convertirse por un día en mensajeros de santidad.
San Lorenzo, San Mauro, San Francisco Javier, San Antonio Abad, Santa Teresa, Santa Inés, San Vicente de Paúl, San Francisco,…. y un sinfín de santos y santas, desfilan e iluminan los pasillos y las clases de primaria. Es una experiencia que siempre resulta muy enriquecedora. Los alumnos mayores descubren cómo Dios se hace presente en la vida de tantas personas cotidianas que fueron capaces de entregarse a los demás, muchas veces hasta la muerte. Personas que han sido testimonio de VIDA y de FE y que nos alientan todavía hoy a seguir sus pasos. Los pequeños reciben ese mensaje de esperanza con ilusión y mucha curiosidad.
Para nosotros, los profesores de religión, es también una actividad también muy importante pues nunca hemos de perder de vista que una de nuestras tareas como maestros cristianos es sembrar espacios en los que Dios pueda colarse, aunque sea un poco, en los corazones de cada uno de nuestros alumnos.
